Mejillones con chorizo y vino
Estos mejillones en salsa de vino blanco son un plato de marisco de calidad de restaurante que puede estar listo en menos de 30 minutos. Es muy rápido y no lleva mucho trabajo prepararlo. Es perfecto para cualquier cena entre semana o para una noche romántica en casa.
¿Cómo se guardan los mejillones cocidos que sobran? Guarda los mejillones cocidos sobrantes en un recipiente hermético. Bien guardados, los mejillones cocidos aguantan hasta 4 días en la nevera o hasta 3 meses en el congelador. Cómo recalentar los mejillones cocidos Puedes recalentar los sobrantes en el microondas durante unos 45 segundos o hasta que estén bien calientes. Cómo elegir los mejillones Busque mejillones bien cerrados que parezcan y huelan frescos.
Pasta con chorizo y mejillones
Salir a pasear con faldas de volantes, picar pescado fresco, quesos y pan empapado en aceite de oliva, y admirar la increíble arquitectura… ahhh. Estas son sólo algunas de las cosas que estoy deseando hacer en Barcelona esta semana. Además, por supuesto, de devorar un plato de mejillones salseados y deliciosos y ver la puesta de sol sobre la ciudad.
Cuando leas esto, ya estaremos en camino, emocionados pero agotados tras un largo día de viaje. Hay mucho que esperar, y la comida será sin duda mi plato fuerte. Pero espero tener muchos buenos recuerdos y hacer muchas fotos mientras estemos fuera.
Sin embargo, antes de nuestra feliz estancia en Barcelona, quería preparar uno de mis platos españoles favoritos para celebrarlo: mejillones y chorizo en un caldo de tomate picante con vino blanco y perejil fresco. ¿A que suena delicioso y mediterráneo?
Si nunca has probado los mejillones, creo que te encantarán. No son pescados ni viscosos, sino esponjosos y tiernos, con un ligero sabor a mar. Además, si quieres, puedes sustituir el chorizo por salchichón de pavo ahumado, ¡queda igual de bien! Hazte también con pimentón ahumado. Su sabor es mucho más intenso y almizclado que el del pimentón normal.
Mejillones con chorizo y tomates
En una sartén grande, cocine el chorizo hasta que se dore a fuego medio-alto, unos 6 minutos. Retirar con una espumadera y escurrir en papel absorbente. Raspe los trozos grandes y deséchelos. Escurrir toda la grasa de la sartén menos 1 cucharada.
Añadir la mantequilla y, una vez derretida, la cebolla picada, el pimentón, los copos de pimiento rojo y la pimienta negra recién molida. Cocinar, removiendo, hasta que la cebolla esté tierna, unos 4 minutos. Añadir el ajo y los tomates, y cocinar, removiendo, durante 2 minutos.
Esta receta forma parte de nuestra serie de recetas en línea que le permitirán probar en casa algunos de sus platos navideños favoritos. Deje sus comentarios a continuación si ha probado esta receta y desea darla a conocer a los demás. Puede que incluso tenga algunas ideas propias que mejoren la experiencia. Siempre nos gusta conocer las experiencias de nuestros socios.
Mejillones con chorizo y nata
PASO 1En una sartén u olla grande donde quepan los mejillones, rehogar la cebolla, los pimientos, el chorizo, el ajo y la ramita de romero en aceite de oliva durante unos 5 minutos a fuego medio-bajo, hasta que la cebolla esté blanda y transparente. PASO 2Antes de cocer los mejillones, presiona las conchas de los que estén abiertos. Si la concha no se cierra, el mejillón debe desecharse (tirar también los que tengan la concha rota). Añadir los mejillones y el vino a la sartén o salsera, mezclando con los demás ingredientes. Tapar y cocer a fuego fuerte durante unos 5 minutos, o hasta que los mejillones acaben de abrirse. Desechar los mejillones que no se abran. PASO 3Pase los mejillones y su caldo a cuencos individuales. Decorar con perejil y servir con pan crujiente para absorber los jugos.
Calorías 687; Grasa total 37,4 gr (48%); Grasa saturada 10,6 gr (53%); Colesterol 113 mg (38%); Sodio 1360 mg (59%); Carbohidratos totales 18,6 gr (7%); Fibra 1 gr (4%); Azúcares 3,4 gr ; Proteínas 41,6 gr; Vitamina D 0%; Calcio 7%; Hierro 59%; Potasio 25%.* Los porcentajes de valores diarios se basan en una dieta de 2000 calorías. Sus valores diarios pueden ser superiores o inferiores en función de sus necesidades calóricas.