Estofado de chorizo y lentejas en slow cooker
Las lentejas con chorizo son la comida reconfortante por excelencia para esos días de invierno en los que salir a la calle es demasiado atrevido. Descubra por qué esta receta tradicional del norte de la provincia de Ávila ha triunfado a través de generaciones de familias españolas.
Probar nuevos ingredientes, aprender nuevas técnicas, crear nuevos platos… son algunas de las cosas que más me gustan de la cocina. También me gusta mucho la improvisación. Esos días en los que vuelves a casa y te has olvidado de hacer la compra. Y luego el reto de hacer algo estupendo con unos pocos ingredientes básicos que quedan en la nevera.
Otros días, sin embargo, me apetece ir a lo seguro. Nada de improvisar, nada de hacer el tonto. Sólo una buena comida reconfortante. Y cuando esos días me ocurren en pleno invierno, eso suele significar lentejas con chorizo.
Las lentejas con chorizo son un toque de realidad, una receta campesina tradicional y democrática que todas las familias españolas llevan comiendo desde hace generaciones. Una única receta con tantas versiones como abuelas hay en el país. Y por encima de todas esas diferentes versiones sólo una verdad absoluta… cuanto más grande sea el amor, mejores serán las lentejas. Esto es slow food en su máxima expresión y la sobredosis de amor es imprescindible aquí.
¿Qué combina bien con las lentejas?
Los mejores condimentos
Piensa en las lentejas como una pizarra en blanco. No tienen mucho sabor por sí solas, pero hacen un gran trabajo al tomar sabores y condimentos. A mí me gusta añadir una combinación de jengibre, ajo, pimentón, cúrcuma, garam masala y sal.
¿Cómo hacer que las lentejas sepan mejor?
¿Es necesario remojar las lentejas antes de la cocción lenta?
No es necesario remojar las lentejas antes de ponerlas en la crockpot, pero sí lo recomiendo. Ayuda a la digestión… si sabes lo que quiero decir. Enjuaga primero tus alubias secas. La forma más fácil de hacerlo es ponerlas en un colador y dejar correr el agua sobre ellas.
Lentejas con chorizo y morcilla
Hacer lentejas desde cero no es tan intimidante como hacer otras recetas de judías. Las lentejas se cocinan rápidamente y no requieren remojo. Por lo tanto, hacer esta sopa no requiere horas de su tiempo y el trabajo de preparación es bastante simple también.
Las lentejas son pequeñas legumbres con forma de lente que están repletas de proteínas, fibra, hierro y minerales. Hay cuatro categorías generales de lentejas: marrones, verdes, rojas/amarillas y especiales. Para esta sopa recomendamos utilizar lentejas marrones o verdes. Ambas son variedades populares que se pueden encontrar en casi cualquier mercado. Además, mantienen su forma con tiempos de cocción más largos.
El chorizo es un tipo de embutido de cerdo. Está fuertemente condimentado con ajo y especias, sobre todo pimentón ahumado (pimento), que da al chorizo su característico color rojo. Cuando compre chorizo, tenga en cuenta que hay dos tipos: seco y fresco.
El chorizo seco (también llamado comúnmente chorizo español) es un embutido de cerdo duro, ahumado y curado. Mientras esté en su envase no requiere refrigeración. Viene listo para comer, sólo hay que quitarle la tripa y ya está listo.
Lentejas con chorizo
Al crear una receta para el evento Winter Warm Up de este año, quería crear una sopa con un poco de calor, no sólo en cuanto a la temperatura, sino también en cuanto a las especias. El resultado fue esta sopa de lentejas ligeramente picante pero abundante, con chorizo mexicano y un toque de tocino. Para darle frescura, añadí algunas espinacas al final y dejé que se marchitasen justo antes de servirlas. Para añadir un poco de riqueza cremosa, sirvo esta sopa adornada con queso de cabra desmenuzado. Acompáñala con una buena copa de nuestro Pinot Noir y entra en calor este invierno.
En una olla grande para sopa, fríe el tocino a fuego medio-alto durante unos 4 minutos hasta que el tocino empiece a estar crujiente. Añade el chorizo molido y saltea de 3 a 5 minutos más hasta que el chorizo esté dorado. A continuación, añada la cebolla y las zanahorias picadas. Saltea otros 5 minutos hasta que las cebollas empiecen a ablandarse. Añada el ajo y saltee otros 30 segundos hasta que el ajo esté fragante.
Añada la sal y la pimienta. La cantidad de sal variará en función del tipo de caldo de pollo que se utilice. Añada la sal gradualmente al gusto. Antes de servir, apague el fuego, añada las espinacas y remuévalas hasta que se marchiten. Sirve la sopa en cuencos grandes con pan crujiente y cubre cada cuenco con queso de cabra desmenuzado.
Receta de sopa de lentejas con chorizo
La lubina frita a la sartén combina perfectamente con este plato de chorizo ahumado y lentejas puy. Las espinacas, el perejil y el zumo de limón se mezclan con las lentejas para darles un sabor maravillosamente fresco. La lubina se fríe en la sartén para obtener una piel maravillosamente crujiente que le hará volver a por más.
A estas alturas, puede que te estés dando cuenta de que me encanta el chorizo. Tiene mucho sabor y esta receta no es una excepción. En esta receta, el chorizo se sirve junto con lentejas puy, espinacas, perejil y limón, todo lo cual realza los sabores sabrosos del chorizo. Encima se sirve un filete de lubina perfectamente cocinado en la sartén. Esta es una receta tan sabrosa y sencilla, que tienes que añadirla a tu rotación de cenas entre semana.
Curiosamente, esta receta es una recreación de algo que comí en un restaurante hace años y años (y años y años). Tengo un vago recuerdo de haber ido un día a los Cotswolds con mi madre y mi tía. Paseamos, tomamos el té y fuimos a comer a un restaurante encantador cuyo nombre no podría decir por amor ni por dinero.