Callos: Una deliciosa receta de la abuela
En la gastronomía española, los callos son un plato tradicional y lleno de sabor. Esta receta, heredada de nuestras abuelas, nos transporta a tiempos pasados y nos permite disfrutar de una auténtica delicia culinaria. En este artículo, te enseñaré cómo preparar unos callos al estilo de la abuela, que seguramente se convertirán en uno de los platos favoritos en tu hogar.
Ingredientes:
- 1 kg de callos de ternera
- 250 g de morro de ternera
- 250 g de pata de ternera
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- 2 zanahorias
- 1 pimiento verde
- 1 hoja de laurel
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- 1 cucharadita de pimentón picante (opcional)
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal al gusto
- Pimienta negra al gusto
Preparación:
- Lava bien los callos, el morro y la pata de ternera con agua fría para eliminar cualquier impureza. Luego, ponlos en una olla grande con agua suficiente para cubrirlos. Hierve durante 5 minutos y escurre. Reserva.
- En otra olla grande, añade un poco de aceite de oliva y caliéntalo a fuego medio. Agrega la cebolla, los ajos y el pimiento verde, todos ellos picados en trozos pequeños. Sofríe hasta que estén dorados.
- Añade las zanahorias cortadas en rodajas y la hoja de laurel. Cocina durante unos minutos hasta que las zanahorias estén tiernas.
- En otra sartén aparte, añade un poco más de aceite de oliva y caliéntalo a fuego medio. Agrega el pimentón dulce y el pimentón picante (opcional) y remueve rápidamente para evitar que se queme.
- Vierte el contenido de la sartén con el pimentón en la olla grande donde están las verduras. Remueve bien para integrar todos los sabores.
- Agrega los callos, el morro y la pata de ternera a la olla. Cubre con agua y sazona con sal y pimienta al gusto.
- Cocina a fuego lento durante 2-3 horas, o hasta que la carne esté tierna y los callos estén suaves.
- Sirve los callos calientes y acompáñalos con pan recién horneado. ¡Disfruta de esta deliciosa receta de la abuela!
Los callos son un plato que mejora con el tiempo, por lo que es aún más sabroso cuando se deja reposar durante unas horas o incluso de un día para otro. Puedes guardarlos en la nevera y recalentarlos antes de servir para disfrutarlos en su máximo esplendor.
En conclusión, los callos son una receta tradicional que nos conecta con nuestras raíces culinarias. Esta versión al estilo de la abuela te permitirá disfrutar de un plato lleno de sabor y tradición. No dudes en prepararlos y compartirlos con tus seres queridos, ¡seguro que se convertirán en un éxito en tu mesa!
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